miércoles, 27 de febrero de 2008

redacción con un hecho moral

Era una pareja con apenas 19 años y la chica se quedó embarazada . Era una decisión muy difícil, pero ninguno de los dos quería renunciar a ello. Los padres de ámbos les aconsejaban que ese no era el momento, pero esos consejos no sirvieron de nada, porque ellos querían seguir adelante.
Al principio estaban muy ilusionados como todos los padres, compraron las primeras cosas para el bebé, empezaron a preparar la habitación... Todo era perfecto.
Los nueve meses pasaron muy rápido, no les había dado tiempo a asimilar la responsabilidad que iban a tener dentro de poco. Llegó el día, todos estaban muy nerviosos, apesar de las complicaciones que hubo en el parto, todo salió como esperaban. Se llamaba Sara, era una niña preciosa y la verdad bastante buena.
Pasarón unos meses y los padres ya se estaban arrepintiendo de la decisión que habían tomado. No aguantaban más los llantos de la niña, el estar siempre pendientes de ella.Sobre todo hechaban de menos la vida de antes, el salir, el estar solos... En fin en hacer lo que les diera la gana.
Deseaban hacer lo de antes y empezarón a dejar a la niña con los padres de ella ya que vivian más cerca. Al principio eran algunos fines de semana, al final se convirtio en una costumbre. Buscaban escusas tontas para dejarla allí. La niña cada vez pasaba más tiempo con sus abuelos.
Pasó un año y Sara definitivamente se quedó a vivir con sus abuelos. Sus padres ivan a verla algunas veces y pensaban ir a buscarla el día que estuviesen preparados.
Pasaron unos años, 15 exactamente. Durante ese tiempo sus padres aún no habían sentido la necesidad de ir a por ella, pero Sara no pensaba así, desde los 8 años se había estado preguntando siempre lo mismo, el porqué no vivía con sus padres, y por mas que buscaba alguna explicación no lo entendía.
Llegó el día, en que los padres, con 35 años, creían que ya era el momento de estar con su hija, de empezar de cero, y de vivir todos esos momentos que se habían perdido. Pero nada pasó como ellos creían.
Sara con 15 años quería que todo siguiese como siempre. No entendía el comportamiento que habían tenido sus padres con ella. Cada año que se iva haciendo más mayor lo entendia menos, y por otro lado estaban sus abuelos. Esas personas que la habían educado, que la habían criado. Que gracias a ellas había conseguido todo lo que tenía y se había convertido en la persona que era. Sobretodo, gracias ellas, había sobrevivido estos 15 años. Sara pensaba que ahora que ellos estaban mayores la necesitaban a ella, y ella tenía pensado estar hay, como ellos habían estado cuando ella los necesitó. Además es lo único que había tenido siempre y no lo quería cambiar.

1 comentario:

Elvia Acosta Monterroza dijo...

me parece que la historia es muy real, sobretodo por la edad de los jovenes padres....y ademas lo q pasò en la historia es lo que pasa en la mayoria de los casos...siempre la responsabilidad les queda alos abuelos del recien nacido....

apesar de ser una historia muy real...creo que deberias ser mas concluso ese final